“En China, tras la reapertura de gimnasios, solo regresó el 15% de los miembros”.

En China, tras poco más de una semana de su reapertura, solo el 15% de los miembros de gimnasios con una oferta tradicional de servicios han regresado a entrenar. Sin embargo, en el caso de los estudio de fitness tipo boutique, que suelen tener una relación más estrecha con sus clientes, parecen estar mucho mejor en términos de retornos de socios. Estos datos se desprenden de declaraciones hechas a Mercado Fitness por John Holsinger, director para Asia Pacífico de IHRSA. “Esto confirma que si el gimnasio logró crear y mantener, durante la cuarentena, una buena relación con sus clientes, estos lo tienen presente y regresan más rápido, sobre todo si lo perciben como un lugar seguro para ellos”. El Gobierno les ha dado permiso a los gimnasios para reabrir en forma gradual y tomando recaudos como el control de la temperatura del personal y los socios, el uso de barbijos, el impedimento de usar las duchas o toallas comunitarias, así como la implementación de turnos de entrenamiento para limitar el número de usuarios y mantener la distancia social. Por otro lado, según el ejecutivo radicado en Sydney, Australia, algunos gimnasios están teniendo dificultades para reabrir de nuevo debido a la falta de personal. “Las prohibiciones de trasladarse dentro de algunas ciudades y estados de China los afectan, porque muchos de sus antiguos empleados aún están alejados de las ciudades donde trabajan”, explica. Según Holsinger, es interesante que “a pesar de que su acceso a información global es limitado, porque se los bloquea el Estado, las soluciones que los gimnasios en China implementaron mientras estuvieron cerrados –como clases online y mantenerse conectados con sus clientes por medios virtuales- son las mismas que vemos en el resto del mundo”. Y algo parecido también está ocurriendo con sus estrategias de reapertura. “Aunque puede haber variantes entre un país y otro en aspectos específicos sobre cómo hacen una u otra cosa, los lineamientos generales que siguen los operadores de gimnasios inteligentes son bastante similares en todo el planeta”, remarca Holsinger. Pero el ejecutivo de IHRSA remarca: “Esto es lo que China está haciendo ahora, pero no necesariamente lo que otros países también deben hacer al salir de la cuarentena”. En esta línea agrega: “Mi principal preocupación es la reinfección que puede producirse  cuando los Gobiernos alivien las restricciones del aislamiento, si lo hacen demasiado temprano”.