Aunque el Gobierno los habilitó para hacerlo, algunos gimnasios en Costa Rica eligen no abrir sus puertas por el momento

Pese a que el gobierno de Costa Rica permitió la apertura de los gimnasios a partir del 1º de mayo, algunos decidieron no hacerlo por el momento por considerar muy restrictivas las condiciones impuestas para comenzar a operar, según lo expresaron en un comunicado de CAFCO, la organización que nuclea a gimnasios en ese país.

Las restricciones que planteó el gobierno costarricense a los gimnasios y centros de acondicionamiento físico consisten en la reducción de su capacidad máxima de ocupación normal a tan solo el 25%, y la habilitación de apertura entre las 5:00 AM y 7:00 PM. Por lo pronto, estas limitaciones regirán hasta el 15 de mayo.

Dada esta situación, “abriríamos a las 5:30 AM, y tendríamos que cerrar a las 6:30 PM para que los clientes puedan ir a sus hogares”, dice Alejandro Bolaños, gerente de la cadena de gimnasios Multispa y miembro de CAFCO. Ante esto, “más de treinta establecimientos tomamos la postura de no abrir”, señala.

“La mayoría de los gimnasios afiliados hemos tomado la decisión de esperar al 11 de mayo, confiando en que tendremos mejores condiciones para que su regreso al gimnasio sea placentero y más seguro. Nuestra posición es ser parte de la solución en la lucha contra la pandemia”, expresa CAFCO en su comunicado.

“En este momento, nos encontramos en comunicación con nuestras autoridades para capacitar a nuestro personal para el cumplimiento del protocolo establecido por el Ministerio de Salud, así como preparando nuestras instalaciones para el fiel cumplimiento de las directrices emitidas”, agrega Bolaños.

Por último, CAFCO “respeta y entiende” a aquellos centros de acondicionamiento que sí reabrieron, “y les deseamos lo mejor en su proceso de reapertura”. En esta línea, el comunicado concluye: “Con muchas ganas de verlos de nuevo, y deseando abrir nuestras puertas cuanto antes, confiamos que saldremos adelante juntos”.

En Costa Rica, los centros deportivos están categorizados en el sector de la salud

Hace más de un año, los centros de acondicionamiento físico de Costa Rica lograron ser considerados dentro del sector de la salud. Esto fue posible gracias a que la organización Centros de Acondicionamiento Físico Costarricense (CAFCO) le pudo demostrar al Ministerio de Salud su importancia de ser encuadrados en esa categoría.

“Con evidencia científica pudimos dar pruebas de los beneficios del ejercicio físico, el mejoramiento del sistema cardiovascular, inmunológico, neuronal, etcétera. Además, nuestra tarea contribuye directamente con la previsión de enfermedades no transmisibles”, explica Alejandro Bolaños, miembro de CAFCO.

A pesar de que los establecimientos deportivos costarricenses estén categorizados dentro del sector sanitario, “es muy incierto decir si esto nos da una mejor posición de cara a la reapertura”, dice Bolaños, al tiempo que añade: “Nosotros ya presentamos a los ministerios de Deporte y Salud nuestros protocolos de reapertura gradual”, agrega.

“Esperamos que con esto recuerden que nuestra industria es parte del sector de la salud y que vamos a ayudar a mejorar el bienestar de la población fortaleciendo con nuestros servicios el sistema inmunológico de las personas”, comenta Bolaños, quien además se desempeña como gerente general de la cadena Multispa.

Los protocolos de acción sugeridos por parte de CAFCO consisten en la implementación de materiales para la higiene personal y del establecimiento, la capacitación de empleados, la reorganización del flujo de los socios y horarios de entrenamiento, y el mantenimiento de la ventilación del local.

Los centros deportivos en Costa Rica están cerrados desde el 18 de marzo pasado. “Tenemos cero ingresos- cuenta Bolaños-. Me atrevo a decir que un 5% de los clientes está ayudando con el pago de la cuota. La mayor parte pidió congelar sus membresías o darse de baja”.

Para afrontar la situación, el Gobierno costarricense permitió “realizar la suspensión del contrato temporal de los trabajadores, arreglar el pago de servicios públicos, flexibilizar los pagos con seguros sociales, y pagar los impuestos diferidos a fin de año”, señala Bolaños, a la vez que el Estado les brinda a las familias un bono de ayuda.