Los 19 hisopados realizados a clientes y staff del gimnasio Performance, de Corrientes, dieron negativo
Quince usuarios y cuatro empleados del gimnasio Performance, de Corrientes tuvieron resultados negativos en el test de Covid-19 que les realizaron entre el 24 y 27 de agosto pasado. Esto ocurrió después de que tuvieron contacto estrecho con otro usuario del gimnasio, que había contraído el virus días antes en otro ámbito.
“Se les hizo el hisopado a todo el grupo de burbuja que asiste al gimnasio en la tarde-noche. Más allá de la ventana de media hora, entre turno y turno, que tenemos para limpiar y desinfectar, se les hizo el testeo a todos, más al profesor, a la recepcionista, a la secretaria y a la persona encargada de limpieza”, relata Ito Iturriaga, propietario de Performance.
El martes 24 de agosto un cliente nuevo del gimnasio se enteró que una persona con la que había tenido contacto estaba persona infectada. Al otro día se hizo el hisopado y le dio positivo. Las autoridades sanitarias identificaron al gimnasio entre los lugares donde esa persona había estado. “Me dijeron que tenía 48 horas para cerrar”, cuenta Iturriaga.
“Un poco antes de que se cumplan las 48 horas, me llamaron del Comité de Crisis del Ministerio de Salud para avisarme que todas las personas testeadas, tanto los socios como los empleados, dieron negativo. Recién entonces me autorizaron a volver a abrir”, añade.
“Más allá de la alegría de la noticia, lo que sentí es una plena satisfacción al confirmar que el protocolo funciona, porque ese era mi temor. Al comienzo, la gente primero se acercó con cierto miedo por la mala prensa que tuvimos los gimnasios”, comenta. En la ciudad de Corrientes los centros de fitness pudieron reabrir sus puertas el 1 de junio pasado.
“Performance estuvo abierto desde ese entonces hasta el martes pasado. Aunque ya me dieron autorización para funcionar otra vez ayer, voy a abrir el gimnasio recién el lunes, por prudencia y responsabilidad civil”, añade Iturriaga.
“Todo este tiempo –prosigue- hemos tratado de que el temor de la gente se vaya y que vuelvan a confiar en la actividad en los gimnasios. Este tipo de episodios confirma que los gimnasios no tenemos la culpa de los contagios, porque cumplimos el protocolo a rajatabla”.