El sobrepeso en niños disminuyó 4,5% desde 2019 en España, según el estudio Aladino 2023, presentado por el ministro de Derechos Sociales, Pablo Bustinduy. Sin embargo, la brecha entre ricos y pobres se acentuó, ya que el 46,7 % de los menores de entre seis y nueve años con exceso de peso pertenecen a familias con ingresos inferiores a 18.000 euros brutos anuales.

El informe detalla que el 36,4 % de los niños con sobrepeso o obesidad provienen de hogares con rentas entre 18.000 y 30.000 euros anuales, mientras que el 29,2 % corresponde a familias que ganan más de 30.000 euros. Estos datos confirman que la prevalencia de obesidad y sobrepeso es significativamente mayor en familias con rentas bajas, una tendencia que se mantuvo constante desde 2011.

En este sentido, Bustinduy subraya que «la obesidad infantil está estrechamente vinculada con el nivel socioeconómico», y añade que las desigualdades en los hábitos alimentarios, la calidad del sueño y el sedentarismo marcan el desarrollo de los niños, especialmente en contextos de precariedad.

El estudio, realizado con una muestra de 12.679 escolares de seis a nueve años en 296 colegios de toda España, también revela que el 2,7 % de los niños sufre delgadez, el 61,2 % se encuentra en normopeso, el 20,2 % tiene sobrepeso y el 15,9 % padece obesidad, lo que lleva a un 36,1 % de menores con exceso de peso.