La cadena de gimnasios PureGym alcanza los 700 gimnasios a nivel global tras la apertura en la región de West Yorkshire, Inglaterra. Esta instalación también es su inauguración número 40 en el Reino Unido durante 2025. PureGym opera en seis mercados internacionales: Reino Unido, Dinamarca, Suiza y Estados Unidos, además de contar con socios franquiciados en Arabia Saudí y en los Emiratos Árabes Unidos.

El director ejecutivo, Clive Chesser, afirma que la apertura del centro número 700 representa un momento de orgullo: “Como empresa y como sector, recorremos un largo camino en los últimos 16 años, aprovechando la creciente importancia de la salud y el bienestar y la consecuente demanda de gimnasios de alta calidad con membresías flexibles y económicas».

El gimnasio de Pontefract ofrece acceso 24/7 a pesas y máquinas de cardio, un estudio de fitness con diversas clases y entrenadores personales certificados. En esta línea, Humphrey Cobbold, presidente de PureGym, explica que la compañía busca atender a grupos con necesidades especiales, incluyendo personas con enfermedades crónicas.

PureGym colabora con Sir Chris Hoy, el Instituto de Investigación del Cáncer y el Royal Marsden NHS Foundation Trust para mejorar los resultados de hombres con cáncer de próstata, ofreciendo membresías gratuitas a quienes padecen cáncer de próstata avanzado y reciben terapia hormonal. Al respecto, Cobbold opina: “Estas acciones no generan beneficios económicos para la compañía, pero es moralmente correcto utilizar nuestros recursos y espacios disponibles para el bien. Esta iniciativa también es valorada por nuestros compañeros, ya que todos conocen a alguien que vive con cáncer de próstata”.

La empresa ofrece membresías gratuitas para personas con Parkinson y proporciona millones de horas al NHS, aunque, según sus responsables, obtiene mejores resultados al colaborar con organizaciones benéficas especializadas. En cuanto a la atracción de adultos mayores, Cobbold reconoce: “Intentamos varias veces. Reservar un área exclusiva para personas mayores no funciona”. Por otro lado, en Dinamarca, Cobbold señala que logran más éxito con iniciativas impulsadas por los propios socios, como organizar reuniones sociales tras las clases o caminatas en las cintas de correr.