El CEO de Peloton, Barry McCarthy, anunció su salida de la empresa. La compañía, conocida por sus bicicletas estáticas y cintas de correr, se encuentra en pleno proceso de reestructuración, con planes para reducir costos por más de U$200 millones de dólares.

McCarthy, quien anteriormente había desempeñado roles clave en Netflix, deja el cargo después de aproximadamente dos años al frente de Peloton. Su partida coincide con la noticia de que la empresa cerrará más salas de exposición y recortará alrededor del 15% de su fuerza laboral a nivel mundial.

Para liderar la transición, Karen Boone, actual presidenta de Peloton y ex presidenta de Restoration Hardware, junto con Chris Bruzzo, miembro de la junta directiva de Peloton, asumirán temporalmente el rol de co-CEOs mientras se busca un sucesor permanente para McCarthy.

La reestructuración de Peloton es una respuesta a los desafíos financieros que enfrenta la empresa, incluida una caída en los ingresos después del «boom» experimentado durante la pandemia. Este último anuncio de recortes no es la primera vez que Peloton implementa medidas de reducción de costos. En los últimos dos años, la compañía cerró aproximadamente la mitad de sus tiendas y despidió a cientos de empleados.

Además de los recortes de costos, Peloton está explorando nuevas estrategias para impulsar el crecimiento, incluida la asociación con terceros minoristas como Amazon y un acuerdo reciente con Hyatt para colocar bicicletas en 800 hoteles.

Sin embargo, en el tercer trimestre fiscal, la compañía reportó una pérdida de U$167.3 millones, con una disminución en los ingresos en comparación con el año anterior. Fundada en 2012, Peloton es una empresa estadounidense que se especializa en la fabricación y venta de equipos de ejercicio para el hogar, principalmente bicicletas estáticas y cintas de correr.