Bonkers Fitness Studio abrió sus puertas en Río Grande
El gimnasio Bonkers Fitness Studio realizó la apertura de sus instalaciones el pasado 2 de diciembre en la ciudad de Río Grande, provincia de Tierra del Fuego. El flamante centro de entrenamiento, cuyo desarrollo comenzó en 2017, cuenta con 400 m2 y en los que hay dos salas: una de Cross Training y la otra de clases aeróbicas.
«Esperamos estar a la altura de las expectativas de nuestros socios. Queremos que se sorprendan con un lugar lleno de estilo y con excelentes rutinas de entrenamiento», señala Juan Romero, propietario de Bonkers Fitness Studio. «Convertimos un galpón viejo abandonado en un gimnasio con instalaciones de primer nivel, cargadas de diseño», agrega.
El dinero invertido para abrir este local fue $3.000.000 de pesos. «En el proceso de construcción sufrimos todas las subas del dólar desde 2017 hasta el día de hoy», según Romero. Para equipar sus salas, Bonkers Fitness Studio eligió las máquinas de G-Fitness, las barras olímpicas de JR, elementos de Sonnos y los pisos de Squat.
«Para la sala de Cross Training cobraremos a nuestros miembros una cuota mensual de $1500 pesos, y para la sala de aeróbica el precio variará según la cantidad de clases que compren, pero el máximo no supera los $1500 pesos», explica Romero. Además, las rutinas de entrenamiento estarán adaptadas para todo tipo de usuario.
«Creemos que el diseño de las instalaciones va a ser un factor fundamental ya que no existen gimnasios así en la zona. Por otro lado, tenemos pensadas muchas acciones para conectar con nuestros socios y hacerlos formar parte de la experiencia Bonkers, que no será solo un espacio para entrenar, queremos que sientan que ésta es su segunda casa», dice Romero.
«Esperamos sorprender a nuestros clientes, que se sientan a gusto con nosotros y lograr una gran comunidad de entrenamiento. Queremos seguir creciendo, tenemos programado sumar en la planta alta del gimnasio gabinetes de estética, un solarium y un tercer salón donde se dictarán clases de Streching, Pilates y yoga», añade Romero.