Que prueben lo que dicen sobre los gimnasios. ¡Que lo prueben!
Hoy me desperté murmurando una frase: “QUE LO PRUEBEN”, sí, que demuestren que lo que dicen sobre los gimnasios, los natatorios y demás centros de actividad física. Por eso, este mensaje es un llamado a la acción: hoy me gustaría instarlos a todos ustedes a que les pidan a sus funcionarios evidencia -de cualquier tipo- que justifique la decisión de mantenerlos aún cerrados en algunos lugares, o lo que es peor, la de volver a cerrarlos cada vez que hay rebrotes del virus.
Pregúnteles: ¿En qué se parece un cine o un teatro a una pileta de natación? ¿Por qué abren las peluquerías antes que los gimnasios? ¿Por qué cierran un estudio de pilates y mantienen abiertos los bares? ¿Por qué acotan las horas de atención si quieren reducir aglomeraciones? ¿Por qué cuando restringen horarios obligan a los gimnasios a cerrar a la misma hora en que sus usuarios salen de trabajar y pueden ir a entrenar? ¿Por qué, si se respetan las distancias requeridas, el cupo máximo de participantes es el mismo para todos los centros sin importar su tamaño?
Por favor, necesitamos entender sus argumentos y, sobre todo, conocer la evidencia que los respalda, para así respetar a nuestros funcionarios en lugar de practicar el deporte de cuestionarlos y perder siempre por goleada. Por eso, pregúntenles por todos los medios –de forma directa, a través de la prensa y de las redes- qué saben ellos que nosotros desconocemos.
Si saben algo, que nos lo cuenten, al menos para aplacar nuestra tristeza e impotencia frente a tanta inoperancia, incoherencia, apatía, desprecio e injusticia. Y cuando no respondan ese pedido –porque todos sabemos que no lo harán- pongan a su disposición de parte nuestra como sector toda la evidencia –tanto científica como empírica- que tenemos para demostrar:
– Que el ejercicio fortalece el sistema inmune y ayuda en la recuperación a pacientes con Covid-19.
– Que el exceso de peso y la obesidad agravan los cuadros de Covid-19.
– Que durante el aislamiento, aumentaron los niveles de sedentarismo y sobrepeso en la población.
– Que los gimnasios, los natatorios y sus entrenadores son actores de salud, no centros de entretenimiento.
– Que los gimnasios son comercios de cercanía (80% de sus usuarios y staff vive y/o trabaja cerca), de modo que su incidencia en la circulación de personas es mínima.
– Que para los usuarios de gimnasios, su salud es importante, por eso se ejercitan regularmente y por eso también respetan las pautas de seguridad para contener la propagación del virus.
– Que respetando los protocolos sanitarios, los gimnasios son ambientes de muy bajo riesgo de contagio de Covid-19.
– Que en durante los últimos 4 meses, en los que muchos gimnasios que estuvieron abiertos, no se registraron contagios de Covid-19 dentro de sus instalaciones.
Díganles también a las autoridades sanitarias y a los funcionarios de sus ciudades que valoramos y respetamos el esfuerzo que realizan para contener el virus, pero que sentimos que nuestro sector ha sido víctima en los últimos meses de una batería de decisiones carentes de argumentos valederos que las respalden, que han tenido consecuencias irreparables para muchos.
Nuestros protocolos sanitarios fueron revisados y aprobados por prestigiosos infectólogos y nos comprometen a cumplir estándares de seguridad que la mayoría de otros espacios –que ya están abiertos e incluso algunos que nunca fueron obligados a cerrar- jamás podrían respetar ni hacer cumplir.
A la luz de hechos que solo oscurecen y frente a los evidentes perjuicios que sufrimos producto de sus prejuicios, háganles saber que tantas decisiones arbitrarias e infundadas generan desconfianza y miedo en la población, lo cual afecta ya no solo el presente de nuestra industria, de nuestros emprendimientos, de nuestras fuentes de trabajo, sino también su futuro.
Nuestro sector es muy importante para la salud de la población, la misma que esos funcionarios dicen que intentan cuidar, con lo cual no podemos claudicar en nuestro pedido de que recapaciten, que revean sus últimas decisiones y que nos aprovechen como aliados en la lucha contra ésta y todas las demás pandemias que nos aquejan hace años.
PORQUE LOS GIMNASIOS SOMOS PARTE DE LA SOLUCIÓN, NO DEL PROBLEMA.
Y NOSOTROS SÍ PODEMOS PROBAR LO QUE DECIMOS…