Un 26% de los usuarios europeos de gimnasios podrían cancelar sus membresías
Un 26% de los europeos que son usuarios en gimnasios podrían cancelar sus membresías en los próximos seis meses, si es necesario. Así lo indica una encuesta de Morgan Stanley realizada a miembros de gimnasios en Alemania, España, Francia, Reino Unido e Italia, que reconocieron estar dispuestos a reducir su gasto en membresía debido a la crisis.
Según la misma encuesta, el 18% de los usuarios ya ha reducido su gasto en fitness en el último mes, lo que supone un punto porcentual más que la oleada anterior de mayo. La mitad de los consumidores europeos cree que la situación económica de sus hogares se va a deterior, siendo la inflación la principal preocupación.
“Los consumidores están comenzando a apretarse el cinturón ya que un número significativo de encuestados dice que ha comenzado a recortar: si la presión financiera continúa aumentando, este fenómeno podría intensificarse”, advierte Morgan Stanley.
En este contexto, hay rubros aún más afectados. La mitad de los usuarios planea reducir sus gastos en bares y restaurantes, mientras que el 40% planea hacer lo mismo en vacaciones y comida a domicilio. Por otro lado, el 37% está dispuesto a reducir sus viajes en automóvil debido al aumento en los precios de la gasolina y el 36% achicará gastos en ropa y calzado.
Según esta encuesta, el 47% de los consumidores apenas llega a fin de mes con algo de dinero, frente al 51% de la ola de mayo. Además, al 32% de los usuarios apenas les queda dinero a final de mes, por lo que suelen recurrir a la financiación o préstamos para pagar sus facturas. Esta cifra representa dos puntos más que la encuesta anterior.
Por otro lado, un tercio de los consumidores no quiere echar mano a sus ahorros para mantener su estilo de vida actual, mientras que el 40% de los europeos piensa lo contrario, por lo que están dispuestos a utilizar sus ahorros para ayudar a mantener su nivel de vida actual, aunque este recurso en media sólo puede durar ocho meses.
Los consumidores que más recortarían gastos son los de mayor poder adquisitivo. Según Morgan Stanley, la cantidad de consumidores de altos ingresos que buscan reducir el gasto en bares y restaurantes se ha disparado. Asimismo, los consumidores también reducirán el consumo de alimentos si es necesario, eligiendo opciones de menor precio.