La obesidad afecta a más de mil millones de personas en el mundo

La obesidad es un problema global que afecta a más de mil millones de personas en todo el mundo, según un estudio dirigido por la revista científica The Lancet. Este análisis, que incluyó a más de 220 millones de personas en 190 países, reveló que las tasas de obesidad se duplicaron entre los adultos desde 1990 y se cuadruplicaron entre los niños y adolescentes. La obesidad creció sustancialmente en la mayoría de los países, con aumentos pronunciados en naciones insulares del Pacífico, el Caribe y América Latina. Luego de Panamá, Chile se destaca como el segundo país de la región donde más aumentó la obesidad en las últimas tres décadas, seguido de México. En 2022, aproximadamente el 45% de la población chilena se ve afectada por la obesidad, marcando un aumento significativo desde el 20% registrado en 1990, tanto en hombres como en mujeres. Asimismo, la prevalencia combinada en hombres, muestra que la obesidad en varios países latinoamericanos afecta a más del 30% de la población, lista encabezada por Argentina y seguida por Chile, Uruguay, Paraguay y México. El estudio también indica que, desde el 2003, la obesidad supera a la delgadez en mujeres, señalando un cambio significativo en la carga de malnutrición en este grupo.  En 1990, Corea del Sur tenía las tasas más bajas de bajo peso y obesidad en adultos, mientras que las naciones insulares del Pacífico y la India presentaban las tasas más altas. Aproximadamente en un tercio de los países, la prevalencia de bajo peso superaba a la de obesidad en mujeres, y en casi la mitad en hombres, principalmente en Asia. Sin embargo, la situación cambió con el tiempo, y para el 2022, la obesidad superó al bajo peso en la mayoría de los países, con notables incrementos en Asia y África. A lo largo de las últimas décadas, la prevalencia de bajo peso disminuyó globalmente, especialmente en Asia, mientras que la obesidad aumentó en la mayoría de los países, con incrementos más significativos en África subsahariana y Estados Unidos. Aunque algunos países lograron reducir la carga de bajo peso, la obesidad se volvió más común en la mayoría de ellos, lo que resultó en un aumento en la prevalencia combinada de bajo peso y obesidad. En cuanto a la India, en 1990 experimentó la mayor prevalencia de doble carga (delgadez y obesidad) en niños en edad escolar, con la delgadez predominando en la mayoría de los países. Sin embargo, desde entonces, hubo una disminución significativa en la prevalencia de la delgadez, especialmente en el sur y sudeste de Asia y el África subsahariana. Esta investigación examinó datos de 3.663 estudios sobre altura y peso de participantes mayores de 5 años, disponibles en el sitio web de NCD-RisC. Para acceder a la investigación completa visite aquí.

En Buenos Aires, Mendoza y Misiones se incrementó el sobrepeso y la obesidad en niños

En los últimos 20 años, en Buenos Aires, Mendoza y Misiones se incrementó el sobrepeso y la obesidad en niños, según un estudio del Conicet y la Universidad Nacional de La Plata. El relevamiento contempló las variaciones en el estado nutricional de niños, niñas y adolescentes de las tres provincias y fue realizado entre los períodos 2005-2009 y 2010-2019. El estado nutricional de niños de 4 a 13 años de las tres provincias reveló que, en los últimos 20 años, bajó la desnutrición, pero se incrementó el exceso de peso en ese grupo etario. Específicamente informaron "una significativa reducción de las prevalencias de malnutrición por déficit, o desnutrición, y un aumento de las prevalencias de malnutrición por exceso, que engloba los casos de sobrepeso u obesidad”. Desde el 2005 a la fecha, en Buenos Aires y Misiones se observó una disminución significativa (cercana al 50% de los valores originales) de las prevalencias de desnutrición. Por otro lado, en Buenos Aires hubo un aumento del 13% de exceso de peso, 10% en Misiones y 9% en Mendoza. Florencia Cesani, investigadora del Conicet y primera autora del trabajo, menciona que los cambios en el estado nutricional del segmento infantil y adolescente del país “podrían relacionarse con eventuales variaciones de las condiciones de vida y la situación socioeconómica de las poblaciones". Manuela Garraza, investigadora del Conicet en el Linoa, y coautora del estudio, cuenta que, entre 2010 y 2019, “fuimos a las mismas escuelas y realizamos una encuesta destinada a relevar las variables socioambientales de residencia”. Es decir, “las condiciones de las viviendas, el acceso a los servicios públicos, el nivel educativo y tipo de trabajo de los padres y las madres, por ejemplo”. A su vez, explica que “efectuamos el mismo estudio antropométrico para recopilar datos de peso, talla y pliegues subcutáneos. Estos últimos nos permitieron analizar el acúmulo tejido graso o adiposidad”. En este sentido, Cesani dice que “en general, las políticas públicas suelen focalizarse en erradicar el hambre y no en mejorar la calidad alimenticia. Además, los alimentos más saludables tienden a ser más costosos y producen menor saciedad”. Esto hace que las familias se inclinen hacia una dieta “generalmente rica en hidratos de carbono y grasas, lo que conduce a un desbalance energético”. Los resultados se obtuvieron con una metodología que utilizaron en un estudio previo financiado por el Conicet, llevado a cabo entre 2005 y 2009, que incluyó a escolares de entre 4 y 13 años de distintas escuelas públicas de las mencionadas provincias. El reciente estudio fue publicado en la revista científica American Journal of Human Biology.